Ya han sido analizadas las rivalidades de Valdivia con Osorno y de Ancud con Castro en la isla de Chiloé, llega el momento de concentrarnos en la capital de la Región de Los Lagos, Puerto Montt. Fundada el 12 de febrero de 1853, es una ciudad mucho más joven que el resto de las otras urbes sureñas, y por lo mismo blanco de las envidias por el notorio despegue comercial, empresarial y turístico conseguido en los últimos años, principalmente desde que la declararon capital de la Región de Los Lagos durante el proceso de regionalización iniciado por el gobierno de Augusto Pinochet.
El surgimiento de los porteños fue paralelo al de la colonización alemana en el sur. En 1848 el gobierno del presidente de Chile Manuel Montt motiva la ley de inmigración y la fundación de la ciudad fue una estrategia del gobierno para cumplir el rol de plataforma para el arribo de los inmigrantes que llegaron desde los estados alemanes y del Imperio Austro-Húngaro a poblar las riveras del enorme lago Llanquihue. Puerto Montt era la plataforma para intentar colonizar el norte de esa zona o hacia el sur por Aysén y hasta Magallanes, por eso su rol fue clave.
Tal como lo había señalado en el primer capítulo el profesor de historia de la Universidad Austral de Chile, Ricardo Molina, la gran masa de inmigrantes alemanes fue ubicándose en distintos lugares del sur de Chile e incluso en la zona central. El docente recordó que en Valdivia se ubicaron en su mayoría inmigrantes profesionales y que ya tenían cierta fortuna, pero a Llanquihue, Osorno y Chiloé llegaron artesanos y campesinos que, gracias a su propio esfuerzo, terminaron convirtiéndose en ricos comerciantes y empresarios que aportaron desarrollo a sus ciudades adoptivas.
En la provincia de Llanquihue el aporte alemán fue notorio en comunas como Puerto Varas (1854), Llanquihue (1852) y Frutillar (1856), además de la ciudad de Puerto Montt, aunque esta última no perdió su impronta de puerto y de su caleta en Angelmó, lo que le daba una connotación más popular que el de sus comunas vecinas.
Ya en el siglo XX, en 1960, días antes producirse el terremoto del 22 de mayo, se funda la base aérea y aeropuerto de El Tepual, por lo que la Fuerza Aérea de Chile (FACh) consideró a la ciudad como un punto estratégico para sus operaciones. Ese factor sería clave posteriormente durante el proceso de regionalización que activó el gobierno militar de Pinochet.
REGIONALIZACIÓN
El profesor Molina no tiene dudas en señalar que los resquemores con Puerto Montt surgieron con la división regional y la primera ciudad en declararse indirectamente rival fue Valdivia. Molina comenta: “En la historia contemporánea del sur de Chile, al crearse y aplicarse en dictadura el sistema regionalizado CONARA (Comisión Nacional de la Reforma Administrativa) a partir de 1974, la nueva X Región de Los Lagos nace teniendo a Puerto Montt como ciudad capital, desplazando a Valdivia que había sido por décadas capital de provincia, cuando Chile estaba dividido en 25 provincias”.
El docente de la Universidad Austral analiza que el régimen militar, aplicando criterios geopolíticos, definió a Puerto Montt como “ciudad pívot”. Añade que esa valoración se hizo para “jugar un rol clave de conectividad y desarrollo con el resto del país hacia el norte, pero muy especialmente con Chiloé y con los territorios australes de Aysén y Magallanes. Con este diseño la idea de las autoridades de entonces era fortalecer la soberanía efectiva del Estado en esos espacios”. En los años setenta el gobierno ya venía trabajando en la carretera austral y había tensiones con Argentina que estallaron con la casi guerra del Canal de Beagle en 1978.
En ese contexto, el ciudadano valdiviano se siente pasado a llevar. Ricardo Molina precisa que Valdivia (fundada en 1552) “detentó su rol de cabeza territorial prácticamente desde su incorporación al Estado chileno en 1820, fuera bajo el nombre de capital de provincia, departamento u otro equivalente. Basta recordar que en 1826, la constitución política de la nueva república establecía que Valdivia era la capital de la provincia del mismo nombre, que abarcaba las delegaciones de la propia Valdivia y de Osorno. En las siguientes modificaciones en el tiempo, Valdivia nunca perdió dicha condición, salvo hasta 1974”. Así se puede explicar el resentimiento valdiviano hacia la ciudad puerto.
FACTOR CHILOTE
Puerto Montt es una ciudad que se formó con chilenos y extranjeros que se trasladaron desde otros puntos. En el caso chileno, Puerto Montt tiene mucha cercanía con la isla de Chiloé y esta isla cumple un rol vital en su poblamiento como también en la refundación de Osorno y en la colonización de Palena, Aysén y Magallanes.
Sobre ese tema, el profesor Molina expresa: “Para la refundación de Osorno, por iniciativa de Ambrosio O´Higgins, se trasladaron por vía marítima 200 familias, a fines del siglo XVIII, desde Chiloé a Valdivia para luego por tierra trasladarse a Osorno. Es decir, Osorno tiene en su ADN mucho de chilote y los alemanes son un aporte relevante pero posterior”.
Sobre el aporte chilote a Puerto Montt, Molina manifiesta que “Puerto Montt tiene desde su asentamiento basal la participación fundacional de muchísimos chilotes en la formación de su comunidad. Así entonces, el sincretismo étnico-cultural de los pueblos originarios (mapuche – huilliche y chonos), más españoles, alemanes y chilenos del norte, construyeron una comunidad con identidad única e irrepetible en esta región del país”.
A la hora de hablar de rivalidades el tema de los chilotes con Puerto Montt pasa porque los isleños son muy celosos de su cultura y ven al continente (Puerto Montt) como una amenaza a sus costumbres y tradiciones a todo nivel. Un caso de ello es el proyecto del puente de Chacao, pues el comercio chilote ve que eso podría ir en desmedro de ellos.
DIFERENCIAS QUE COMPLEMENTAN
En los últimos años Osorno ha mirado con recelo a la capital de Los Lagos, sobre todo a la hora de discutir los presupuestos para ambas provincias. Antes de 2007, Osorno tuvo la opción de unirse con Valdivia para ser parte de la región de Los Ríos, sin embargo más pudo su rivalidad de años con los ciudadanos del Calle Calle y optaron por quedarse en la Región de Los Lagos.
Actualmente Osorno siente que tiene diferencias claras con Puerto Montt en cuanto a idiosincrasia. Las ciudades de la cuenca del lago Llanquihue han explotado su lado turístico a diferencia de Osorno que es más ciudad. No obstante, Osorno y Puerto Montt se complementan en lo industrial con el gran potencial de producción de carnes y leche y sus derivados de los osorninos y el despegue de la industria del salmón de los puertomontinos, lo que hace que la Región de Los Lagos sea una región interesante para los profesionales dedicados a esas áreas.
Por lo demás, las rivalidades de ambas ciudades no pasan más allá de los enfrentamientos deportivos y terminaron más hermanadas, principalmente por la mala onda que estas dos urbes tienen contra Valdivia, el “otrora aristócrata arruinado”, tal como la califican ahora profesionales osorninos y puertomontinos.
Grupo DiarioSur, una plataforma informativa de Global Channel SPA. Powered by Global Channel