La próxima semana concluiría la auditoría que está realizando el Hospital Base San José de Osorno, luego que una mujer presentara fuertes dolores tras una cesárea realizada en ese centro asistencial y, tras 17 días, se descubriera que una compresa había quedado en el abdomen de la paciente, durante la citada cirugía.
Así lo informó el director (s) del hospital osornino, doctor Hans Hesse, quien dijo que un evento adverso de este tipo “es muy poco común” y, junto con expresar que están revisando desde el punto de vista clínico, de pabellón y de calidad “si hubo una falla en un proceso de control”, reconoció que deberán “ser más acuciosos respecto del conteo de las compresas y de todos los insumos que se utilizan, y estar más alertas a eso”.
Agregó que “lamentablemente las personas quedan heridas, molestas y sentidas con la institución y, obviamente, todos esos malos ratos que la gente vive, el sufrimiento, la angustia y la rabia, eso no pasa tan fácilmente, pero desde el punto de vista general, afortunadamente, tanto la mamá como el bebé están bien”.
El doctor Hesse acotó que la familia hizo sus descargos y conversó con el jefe de Ginecología y el subdirector médico del hospital, pues “ellos están acusando negligencia médica, pero lo que nosotros estamos viendo es que hubo un evento adverso importante, que fue el que haya quedado una compresa dentro del abdomen en un procedimiento quirúrgico”.
Además, comentó que la familia de la paciente presentó un reclamo y probablemente inicie un proceso legal, por lo que están recabando todos los antecedentes, los que dijo fueron enviados y están pidiendo copia de la ficha.
Junto con precisar que la paciente tuvo un embarazo de alto riesgo, porque hizo una trombosis venosa y estuvo en tratamiento anticoagulante durante gran parte del embarazo y, tuvo un bebé de término que nació sano y sin inconvenientes, el director (s) del Hospital Base de Osorno agregó que a la paciente le sacaron el “cuerpo extraño” y este lunes 14 de septiembre fue dada de alta, “sin que afortunadamente haya quedado con una lesión que le deje secuelas ni discapacidad”.
Asimismo, el doctor Hesse explicó que, en términos legales, una negligencia médica tiene que ver con una lesión causada a un paciente por no haber obrado de una manera correcta y, en ese sentido, la ley indica que la actuación tiene que ser negligente desde el punto de vista del caso y de la técnica. Vale decir, que una negligencia provoca un daño físico o moral producto de un acto que es imprudente o hecho desde el desconocimiento.
URGENCIA
Consultado respecto de por qué no se le practicó un examen a la mujer cuando llegó a la urgencia de dicho centro asistencial con fuertes dolores abdominales, y se le dijo que era un cólico, el doctor Hesse indicó que “en un contexto de una cesárea reciente y con pocos días de evolución, puede presentar dolores y complicaciones de ese tipo”. Y añadió que, “a veces, los cuerpos extraños, como no presentan una reacción inflamatoria inmediata, no se evidencian y eso, con el paso de los días, aparecen más claros”.
Además, expresó que la realización de un examen debe ser analizada por el médico en ese momento, y manifestó que “si él no lo consideró necesario, era porque la paciente no estaba con complicaciones o no estaba con síntomas que eran tan importantes como después, porque esto evoluciona y cuando uno tiene un cuerpo extraño hace reacciones inflamatorias tardías, fiebre, dolor”.
Pero precisó que todo esto es parte de la auditoría que se está realizando y que, una vez concluida y dependiendo de los hallazgos que ésta tenga, se verá si corresponde iniciar una investigación sumaria, que tiene como fin establecer responsabilidades administrativas.
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